El 7 de Junio de 1810 salio el primer numero de “Gazeta de Buenos
Aires”, que inicio la historia del periodismo nacional.
A raíz de ello, esa fecha fue instituida como “Día del Periodista”. El periódico
fue fundado por Mariano Moreno, quien fue también su primer redactor cumpliendo
una orden de la Junta de Gobierno y tenia por objetivo divulgar las noticias
del interior y del exterior. Pero sobre todo su propósito era político:
difundir los actos de gobierno y hasta las discusiones que surgían entre los
miembros de la Junta. Durante mucho tiempo el país había padecido la censura
impuesta por el régimen colonial español, y el gobierno revolucionario pensaba
que la libertad de prensa era un freno para la arbitrariedad de los gobiernos,
un medio de ilustrar al pueblo y el único camino para llegar al conocimiento de
la verdadera opinión publica.
“Gazeta de Buenos Aires” llevaba como encabezamiento una frase del
historiador Tácito, que ilustra muy bien sobre su ideología: “Rara felicidad de
los tiempos en que se permite sentir lo que se quiera y decir lo que se
sienta”.
El periódico se edito hasta Septiembre de 1821.
Mariano Moreno se mantuvo en el cargo hasta Diciembre de 1810, cuando
abandono el puesto y fue reemplazado por el Dean Funes.
Durante el tiempo en que la dirigió,”La Gazeta” fue una muestra de su
apasionado sentido de la libertad.
Podemos decir hoy, que los seudos adalides de la libertad que mediante tortura
y coacción se apoderaron de Papel Prensa, que con jueces cómplices, titulares
en los grandes diarios cipayos y cautelares mediante, impidieron la aplicación
plena de la Ley de Medios del gobierno anterior, ley discutida y aprobada democráticamente
en el parlamento y ratificada por la Suprema Corte de Justicia, que hoy es
prácticamente desconocida por el gobierno neoliberal de Cambiemos. Por eso, el
poder comunicacional de los grandes diarios, y los escribas del desanimo de
ayer y la “FELICIDAD DE HOY”, lo que buscan no es esa libertad, sino el
monopolio total de la información para seguir colonizando, desinformando y
manipulando la mente de los argentinos, lo que A. Jauretche llamaba “la
colonización mental y la superestructura cultural. Por eso, saludamos al
autentico periodista y comunicador que vive por y para la noticia y su
acendrado amor por la verdad que lo ha llevado muchas veces a la proscripción,
a la cárcel… y aun a la muerte.
Nelson R. Coronel, para el Ateneo Arturo Jauretche.