BOLIVAR, SAN MARTIN,
MARTI, YRIGOYEN, UGARTE,
PERON, EL CHE, CHAVEZ, KIRCHNER,
SUS PRECURSORES MAS
DESCOLLANTES.
La idea de la unidad de nuestra
America, a pesar de
contar con una amplia aceptación y tener una larga
tradición, no encontraba una fecha que la represente
cabalmente y sea aceptada por todos los sectores interesados.
contar con una amplia aceptación y tener una larga
tradición, no encontraba una fecha que la represente
cabalmente y sea aceptada por todos los sectores interesados.
El primero en preocuparse por ello fue, quizás,
el presidente
Hipólito Yrigoyen, quien asumió su primer gobierno en 1916,
con una clara vocación antiimperialista, que lo llevo a
mantener –tozudamente- la neutralidad del país en la
primera guerra mundial y a promover un Congreso
Latinoamericano que fracasó por la abierta oposición de
Estados Unidos.
Hipólito Yrigoyen, quien asumió su primer gobierno en 1916,
con una clara vocación antiimperialista, que lo llevo a
mantener –tozudamente- la neutralidad del país en la
primera guerra mundial y a promover un Congreso
Latinoamericano que fracasó por la abierta oposición de
Estados Unidos.
Pero lo importante para Yrigoyen era levantar
la bandera
de nuestra Patria Grande.
de nuestra Patria Grande.
Concibió así la idea de fijar una
fecha que simbolizara la
relación de hermandad que existía entre todos los
pueblos indo americano. Se decidió por el 12 de Octubre,
el día en que Europa y la Antigua America se encontraron
dando origen a una nueva realidad.
relación de hermandad que existía entre todos los
pueblos indo americano. Se decidió por el 12 de Octubre,
el día en que Europa y la Antigua America se encontraron
dando origen a una nueva realidad.
Denomino a esa fecha “Día de la
Raza”. Pero la
fecha y su denominación no fueron felices y pronto
significaron fuentes de malentendidos, empezando por
la palabra “RAZA”, que en el lenguaje yrigoyeniano no
tenía una dimensión biológica sino sociológica y significaba
la unión en igualdad de condiciones de indios, blancos
y negros, amalgamados por la tierra, la cultura y el
destino común. Con ese significado la vemos utilizada por
escritores del siglo XIX –en que Yrigoyen se formo- y de
principios del siglo XX, como por ejemplo Alberdi o Rojas.
fecha y su denominación no fueron felices y pronto
significaron fuentes de malentendidos, empezando por
la palabra “RAZA”, que en el lenguaje yrigoyeniano no
tenía una dimensión biológica sino sociológica y significaba
la unión en igualdad de condiciones de indios, blancos
y negros, amalgamados por la tierra, la cultura y el
destino común. Con ese significado la vemos utilizada por
escritores del siglo XIX –en que Yrigoyen se formo- y de
principios del siglo XX, como por ejemplo Alberdi o Rojas.
Al compás de los totalitarismos europeos, la
palabra
adquirió después un contenido étnico y agresivo que fue
invalidando su uso y también la fecha empezó a ser
cuestionada desde hace algún tiempo y con razón, por
sectores que ven en ella un símbolo de colonialismo y en
especial de la agresión contra las poblaciones aborígenes.
adquirió después un contenido étnico y agresivo que fue
invalidando su uso y también la fecha empezó a ser
cuestionada desde hace algún tiempo y con razón, por
sectores que ven en ella un símbolo de colonialismo y en
especial de la agresión contra las poblaciones aborígenes.
Desde la Unión Panamericana, ente antecesor de
la actual Organización de Estados Americanos, se propuso
celebrar el 14 de Abril como “Día de las Américas”. La fecha
recuerda la Primera Conferencia Panamericana,
organizada bajo la iniciativa y la presión de los Estados
Unidos y celebrada en Washington en 1889. Tanto la
fecha como su denominación, junto con el
concepto de panamericanismo, encierran una pretensión
grata a la potencia dominante, como es la de encolumnar
a todos los países del continente tras su conducción
hegemónica y al servicio de los intereses de su expansión
imperial.
Todo ello enmascarado con el disfraz de la solidaridad
continental que surge de la engañosa y ambigua
formula de la doctrina Monroe. La idea, sin embargo,
solo fue considerada en los amibitos oficiales y apenas
contó con la adhesión de los diplomáticos.
Los pueblos la sociedad real, el mundo de la cultura,
jamás lo reconocieron.
la actual Organización de Estados Americanos, se propuso
celebrar el 14 de Abril como “Día de las Américas”. La fecha
recuerda la Primera Conferencia Panamericana,
organizada bajo la iniciativa y la presión de los Estados
Unidos y celebrada en Washington en 1889. Tanto la
fecha como su denominación, junto con el
concepto de panamericanismo, encierran una pretensión
grata a la potencia dominante, como es la de encolumnar
a todos los países del continente tras su conducción
hegemónica y al servicio de los intereses de su expansión
imperial.
Todo ello enmascarado con el disfraz de la solidaridad
continental que surge de la engañosa y ambigua
formula de la doctrina Monroe. La idea, sin embargo,
solo fue considerada en los amibitos oficiales y apenas
contó con la adhesión de los diplomáticos.
Los pueblos la sociedad real, el mundo de la cultura,
jamás lo reconocieron.
Finalmente, el Segundo Congreso Anfictiónico
Bolivariano,
reunido en Caracas en Julio de 1997, acordó celebrar el
22 de Junio como el Día de la Unidad de America Latina y
el Caribe. La fecha recuerda el día que se instalo en 1826 el
Congreso Anfictiónico de Panamá, convocado por Simon
Bolívar para promover la confederación de los Nuevos
Estados Americanos, herederos del imperio español.
Es decir, una unión entre iguales, libres e independientes.
reunido en Caracas en Julio de 1997, acordó celebrar el
22 de Junio como el Día de la Unidad de America Latina y
el Caribe. La fecha recuerda el día que se instalo en 1826 el
Congreso Anfictiónico de Panamá, convocado por Simon
Bolívar para promover la confederación de los Nuevos
Estados Americanos, herederos del imperio español.
Es decir, una unión entre iguales, libres e independientes.
Aunque la iniciativa fracaso en su momento,
marco un ideal
enraizado ya en nuestra tradición, porque se mantuvo desde
entonces como una aspiración legitima y superadora de
las mejores expresiones de nuestra Patria Grande. Es
una fecha propia, que nada debe a acciones o pretensiones
ajenas y señala el camino de la liberación nacional
y social, independientes de toda tutela. Celebrarla será
trabajar por la afirmación de nuestra identidad moral y
material.
Dr. Nelson Coronel para el Ateneo Arturo Jauretche
enraizado ya en nuestra tradición, porque se mantuvo desde
entonces como una aspiración legitima y superadora de
las mejores expresiones de nuestra Patria Grande. Es
una fecha propia, que nada debe a acciones o pretensiones
ajenas y señala el camino de la liberación nacional
y social, independientes de toda tutela. Celebrarla será
trabajar por la afirmación de nuestra identidad moral y
material.
Dr. Nelson Coronel para el Ateneo Arturo Jauretche
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